El mercado de camiones de segunda mano se recuperó en 2023, tras la bajada de 2022. Las ventas aumentaron un 7,5 %, hasta los 336.454 vehículos, pero aún estaban un 11,9 % por debajo de las cifras de 2021.

Esta recuperación se debe a varios factores, como la mejora de la economía y la escasez de vehículos nuevos. Sin embargo, aún existen factores que frenan el crecimiento del mercado, como la inflación y la incertidumbre económica.

Causas de la recuperación

La mejora de la economía es uno de los factores que ha contribuido a la recuperación del mercado de camiones de segunda mano. El aumento del consumo y la inversión ha impulsado la actividad económica, lo que ha generado una mayor demanda de transporte.

La escasez de vehículos nuevos es otro factor que ha impulsado el mercado de camiones de segunda mano. La crisis de los semiconductores ha dificultado la producción de vehículos nuevos, lo que ha reducido la oferta y ha elevado los precios.

Factores que frenan el crecimiento

A pesar de la recuperación, el mercado de camiones de segunda mano aún tiene margen de crecimiento. Hay varios factores que frenan su crecimiento, como la inflación y la incertidumbre económica.

La inflación está provocando un aumento de los costes de los vehículos de segunda mano, lo que puede dificultar su acceso a los compradores. Además, la incertidumbre económica puede hacer que los compradores sean más reticentes a realizar grandes inversiones.

Previsión para 2024

Se espera que el mercado de camiones de segunda mano siga creciendo en 2024, aunque a un ritmo más moderado que en 2023. Las principales tendencias que se prevén para el próximo año son:

• El aumento de la demanda de vehículos eléctricos e híbridos.
• La consolidación del “efecto tacógrafo” en el mercado de tractoras.
• La renovación del parque de vehículos industriales, que sigue siendo muy antiguo.

El mercado de camiones de segunda mano se recuperó en 2023, pero aún tiene margen de crecimiento. Las principales causas de esta recuperación fueron la mejora de la economía y la escasez de vehículos nuevos. Sin embargo, aún existen factores que frenan el crecimiento del mercado, como la inflación y la incertidumbre económica.

Se espera que el mercado siga creciendo en 2024, aunque a un ritmo más moderado. Las principales tendencias que se prevén para el próximo año son el aumento de la demanda de vehículos eléctricos e híbridos, la consolidación del “efecto tacógrafo” en el mercado de tractoras y la renovación del parque de vehículos industriales.