Y en esta dinámica queda enmarcada la decisión de Toyota España de abrir la preventa en su red de concesionarios de la Proace Electric Van, la variante alimentada por batería con cero emisiones en su funcionamiento. La entrega de las primeras unidades está prevista para el próximo mes de marzo.
Se trata de la primera incursión de la marca japonesa en el segmento de los vehículos comerciales 100% eléctricos
La Toyota Proace Electric Van llega al mercado nacional con dos tipos de baterías de ion-litio, de 50 kWh y 75 kWh, para ofrecer una autonomía eléctrica de hasta 230 y 330 km, respectivamente. En ambos casos cuentan con recarga rápida gracias al cargador a bordo de 11 kW y suministran la energía a un motor eléctrico de 136 cv DIN, con un par máximo de 260 Nm y una velocidad máxima limitada electrónicamente a 130 km/h.
La recarga de la batería se podrá realizar tanto en un enchufe doméstico como en un wallbox y un poste de carga rápida, siendo estas dos últimas opciones las más recomendables. En un wallbox de 16 ó 32 amperios y una potencia de salida de 11 ó 22 kW, la batería de 50 kWh necesita 4 horas y 45 minutos para recargarse por completo, mientras que la de 75 kWh tarda siete horas. En un poste de recarga rápida en corriente continua de 50 kW, los tiempos de carga son de 43 minutos para la batería de menor potencia (50 kWh) y 1 hora y 15 minutos para la de mayor potencia (75 kWh), reduciéndose a 32 y 48 minutos respectivamente en el caso de un poste de carga rápida de 100 kW.
Este nuevo comercial ligero eléctrico ofrece las mismas características de volumen y capacidad de carga y capacidad de remolque que el resto de de variantes de la gama, es decir, 4,6 a 6,1 m3 de volumen de carga y hasta 1,2 t de capacidad de carga, con la posibilidad de remolcar hasta una tonelada. Se vende con tres tipos de longitud de carrocería —Corta, Media y Larga— y dos acabados —GX y VX—. La filial española de la marca japonesa prevé que la versión más vendida sea Proace Electric Van con carrocería Media, acabado GX y batería de 75 kWh.
En el capítulo de diseño no aparece diferencia alguna frente a los Proace de propulsión térmica, salvo la toma de recarga ubicada sobre el paso de rueda delantero en el lado del conductor. En el interior, la única variación es el panel de instrumentos, con información específica sobre el consumo eléctrico o el porcentaje de carga de la batería, entre otros, además de la sustitución de la palanca de cambios por una botonera con las diferentes posiciones y modos de conducción.
Los precios de la Proace Electric Van arrancan en 32.998 euros en versión 50 kW y por 37.498 euros en el caso de la variante de 75 kW, cifras que no incluyen las ayudas establecidas en el Plan Moves II, que pueden suponer de 2.900 a 6.000 euros de ahorro en función del tipo de cliente y si existe o no achatarramiento de un usado.
