No fue un buen año 2020, no podía serlo, para el mercado español de comerciales ligeros, que cerraron el ejercicio con un descenso del 24,6%, con un total de 158.117 unidades matriculadas. El análisis de la situación por segmentos, sin embargo, arroja realidades bien distintas en función de cada uno de los tipos de vehículo. 

Así, el desplome fue absoluto entre los derivados de turismo, con un -47% y 394 operaciones, si bien se trata de una clase de vehículo que registra una demanda muy reducida en nuestro mercado.

También cayeron por encima de la media del mercado las matriculaciones de furgonetas (la categoría con mayor demanda a mucha distancia del resto), con un -35,5% y 81.285. Los pick-up, por el contrario, registraron un descenso del 18%, un dato más favorable que el del conjunto del mercado de comerciales ligeros, con un total de 8.622 altas.

Por lo que se refiere a los comerciales ligeros de hasta 2,8 toneladas, el pasado año reflejó una caída del 26,1% tras matricularse 14.858 vehículos.

Con todo, el mejor resultado por segmentos, entendida esta afirmación como la categoría que mejor resistió el azote de la crisis derivada de la pandemia, estuvo localizada en el grupo de furgones/combi de entre 2,8 y 3,5 toneladas, una realidad muy ligada al extraordinario auge que vive el comercio electrónico. El descenso fue del 14,5% con un total de 44.903 vehículos matriculados.

Finalmente, la categoría de camión/chasis cabina, con el mismo tonelaje que el último segmento analizado, acabó el año pasado con una bajada en sus matriculaciones del 24,3% y 8.055 unidades.