Los fabricantes de vehículos industriales de Europa están convencidos de que lo mejor para impulsar la transición energética es mejorar la rentabilidad de los camiones cero emisiones, en vez de imponerles límites de emisiones. La patronal de fabricantes ACEA ha fijado sus posiciones respecto a la propuesta de la Comisión Europea que pretende limitar un 90% las emisiones de los camiones.

"Garantizar que se dan las condiciones necesarias para que los transportistas inviertan en vehículos de emisiones cero y puedan utilizarlos de forma rentable es aún más importante que fijar objetivos de emisiones para los fabricantes de vehículos. Por lo tanto, Europa debe aspirar a un enfoque pragmático, progresivo y tecnológicamente neutro que fomente soluciones escalables y que pueda servir de guía mundial para la descarbonización del transporte por carretera", explica la patronal.

Subrayan que están firmemente comprometidos a proporcionar "los vehículos adecuados para que la industria europea del transporte por carretera pase a soluciones libres de combustibles fósiles en 2040, centrándose en los vehículos propulsados por baterías eléctricas e hidrógeno". Pero recuerdan que son un sector enfocado a las empresas del transporte: "Los transportistas y operadores invierten en vehículos en función de consideraciones de rentabilidad".

Objetivos de la Comisión

En febrero, la Comisión Europea propuso una revisión de la normativa relativa a los objetivos de reducción de CO2 para vehículos pesados. Esta revisión legislativa propone reforzar los niveles objetivo existentes para los camiones hasta reducirlos un 45% en 2030, un 65% en 2035 y un 90% en 2040.