MAN Truck & Bus ha inaugurado oficialmente la producción de baterías en la planta de Núremberg (Alemania) en la que la inversión total asciende a 500 millones de euros.
A los cerca de 100 millones de euros ya invertidos en esta planta, se sumarán otros 150 millones de euros en los próximos años con el fin de ampliar la experiencia en el ámbito de la tecnología de baterías e incrementar el valor añadido. En estas instalaciones, no solo se fabricarán paquetes compuestos por varios módulos, sino también los propios módulos que combinan distintas celdas de baterías.
De la inversión adicional anunciada, alrededor de 18 millones estarán subvencionados. Tanto el Ministerio Federal de Economía y Protección del Clima (BMWK) como el estado libre de Baviera participan en esta financiación. Este último también aportará unos 30 millones de euros para impulsar la investigación y desarrollo de la tecnología de baterías en las instalaciones de MAN en Núremberg. Estos fondos se destinarán a la investigación de áreas como el ensamblaje de baterías, la composición química de las celdas y su envejecimiento, así como la seguridad de las baterías.
Según subraya la compañía, las inversiones en Núremberg garantizan alrededor de 400 puestos de trabajo y, al mismo tiempo, permiten seguir avanzando en la transformación de la planta. Los empleados que se dedican ahora a la fabricación de baterías trabajaban anteriormente en áreas como montaje de motores, fundición o logística.
La producción de baterías es la segunda nueva línea de producción que MAN inaugura en la planta de Núremberg este año. Por otra parte, la producción de la última generación de motores diésel, que se utilizan en la nueva cadena cinemática D30 PowerLion, ha contado con una inversión de 250 millones de euros. Actualmente, la compañía estima que casi la mitad de los camiones en Europa y alrededor del 90% de los autobuses urbanos se suministrarán con sistemas de propulsión de emisiones cero en 2030. Otras plataformas y series de motores también estarán disponibles a largo plazo en el negocio de motores externos de MAN.
50.000 PAQUETES DE BATERÍAS AL AÑO
En esta planta de MAN en Núremberg se fabrican paquetes de baterías en tres formatos (denominados factores de forma) diferentes. Un formato plano se utiliza en el autobús urbano eléctrico MAN Lion's City E, mientras que los otros dos formatos se emplean en los camiones eléctricos MAN eTGL, MAN eTGS y MAN eTGX, con pesos totales de 12 a 50 toneladas. El arranque de la producción en serie de los modelos eléctricos eTGS y eTGX en la planta de Múnich está previsto para junio de este año.
En la actual fase de expansión, la planta de Núremberg puede producir 50.000 paquetes de baterías al año. No obstante, el nuevo edificio M50 está diseñado para alcanzar una capacidad de 100.000 unidades anuales. La producción de baterías se ampliará en función de la demanda de vehículos eléctricos.
Para sus baterías, la compañía utiliza la química de celdas NMC (níquel-manganeso-cobalto), adaptada específicamente para vehículos industriales. El sistema de gestión de baterías (BMS) monitoriza de manera constante el estado de las celdas durante su funcionamiento. Asimismo, incorpora un sistema inteligente de calefacción y refrigeración que mantiene las celdas de la batería en un rango de temperatura óptimo en todo momento.
La producción modular es uno de los aspectos tecnológicos más destacados de la nueva fabricación a gran escala de paquetes de baterías. MAN emplea un sistema sin cintas transportadoras ni ciclos fijos, capaz de gestionar distintas variantes de producto y adaptarse a nuevas configuraciones. Las estaciones desacopladas pueden operarse y modificarse de forma independiente unas de otras, de tal forma que los paquetes de baterías circulen por el sistema de acuerdo con los requisitos individuales y su estado. Esto se logra mediante un alto grado de digitalización y automatización, tanto en el flujo de producción como en el suministro de materiales, que se realiza mediante vehículos de guiado automatizado (AGV) conectados de forma inteligente.
Cada paquete de baterías se somete a una prueba al final de su fabricación que incluye varios test de software, pruebas eléctricas como carga/descarga, verificación de los datos de las celdas y los módulos de la batería suministrados por los proveedores, y una prueba de estanqueidad.