Correos ha transformado 18 de sus furgonetas para que presten servicio en Correos Frío, su solución logística para los envíos que requieren de un transporte a temperatura controlada. El operador estatal ha acondicionado así 15 vehículos refrigerados y tres vehículos isotermos. La previsión de la compañía es incorporar más de 60 nuevos vehículos de este tipo el próximo año de modo que, a finales de 2023, Correos dispondrá de cerca de 80 vehículos de estas características en su flota. 

La transformación de estos vehículos ha consistido en isotermar su interior, incorporándoles adicionalmente un equipo frigorífico que mantiene el interior de la caja a la temperatura que el cliente necesite. Además, el operador explica en un comunicado que "llevan instalados un termógrafo, sondas y varios sensores que permiten controlar el mantenimiento de la cadena de frío en tiempo real a través de la plataforma de control de Correos, lo que permite ser proactivos ante cualquier incidencia que se pueda detectar en el reparto".

30 clientes

Estos vehículos están destinados, principalmente, al reparto de productos frescos (mariscos, carne, pescado, etc.) en la última milla. Se están utilizando en Madrid, Valencia, Sevilla y Barcelona para atender a los más de 30 clientes, especialmente del sector de alimentación.

Además de con vehículos refrigerados e isotermos, Correos Frío también dispone de otra solución mediante el uso de cajas isotérmicas sensorizadas, con las que Correos puede monitorizar la temperatura, humedad o posibles impactos desde la recogida del envío hasta su entrega y facilitar esa información en tiempo real a los clientes.