El Gobierno de Reino Unido ha endurecido sus controles migratorios y esto afecta a las empresas que realizan transporte de mercancías entre Reino Unido y Europa, que se enfrentan a multas de hasta 10.000 libras (casi 12.000 euros) por cada persona no autorizada hallada a bordo. Incluso si el transportista no es culpable, su empresa debe responsabilizarse de ello, según explica Lextransport, compañía especializada en productos y servicios dirigidos a empresas y profesionales que operan en el transporte por carretera.
Cada vez son más exigentes las inspecciones en puertos como Calais o Dover, donde las fuerzas de frontera detectan polizones ocultos en los vehículos. "Esta situación genera retrasos, problemas operativos y conlleva sanciones que pueden alcanzar las 10.000 libras", explica Lextransport .
La empresa de servicios, que incluye al despacho de abogados especializado en transporte Valleon Abogados, explica que existe “una salida ante este escenario”, pero que no todos los profesionales lo saben: “El Gobierno británico ha desarrollado un programa de empresas seguras (Haulier Security Accreditation), que permite a aquellas compañías que implanten protocolos de seguridad certificados beneficiarse de importantes ventajas: reducción del riesgo de sanciones y, en caso de infracción, una rebaja automática del 50% en las multas"
Primeros pasos para proceder
Implantar estos protocolos no es tarea sencilla. Requieren de conocimientos jurídicos específicos y experiencia en materia migratoria y de transporte internacional. "Hacerlo sin conciencia puede desembocar en la paralización de los viajes a Reino Unido por meses", avisa Lextransport.