La principal barrera para el despliegue del camión eléctrico de larga distancia es la infraestructura de recarga. Pero el director de Innovación y Sostenibilidad de Iberdrola, Agustín Delgado, afirma que conducir un camión eléctrico será más barato que uno de gasóleo en cinco años.

Con ese objetivo, Delgado y el director general de la Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso de la Movilidad Eléctrica (Aedive), Arturo Pérez de Lucia, han firmado la Alianza para la Descarbonización del Transporte por Carretera, en un acto celebrado este lunes en la sede del grupo Iberdrola en Madrid, donde se han exhibido algunos modelos de camiones eléctricos, y al que ha asistido el presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán.

Delgado ha explicado que Iberdrola ya tiene puntos de recarga de camiones y ya se están recargando vehículos pesados en España. Por su parte, el director general de Aedive ha destacado el gran avance que ha experimentado la movilidad eléctrica y ha recordado cómo hace unos años un cargador de 50 kilovatios se consideraba de carga rápida; mientras que ahora Iberdrola ya instala hasta de 400. 

Además, Arturo Pérez de Lucia ha señalado que en la última parte de 2024 estará ya disponible un cargador con un capacidad de carga de un megavatio , lo que supone que se puedan cargar camiones en menos tiempo del que dura el descanso del conductor.

También ha indicado que para 2030 los camiones eléctricos tendrán una cuota del 50% en Europa y que, si a finales de 2022 había 4.000 camiones eléctricos en Europa, las previsiones de la Unión Europea son que serán más de 80.000 en 2025 y 600.000 en 2030.

En cinco años

Tras la firma, Delgado ha explicado a los medios de comunicación que, cuando en cinco años ya sea más barato conducir un camión eléctrico que uno que emplee gasóleo, los operadores logísticos y los transportistas van a empezar a comprar camiones eléctricos.

Agustín Delgado ha señalado que la ventaja de un camión eléctrico no va a estar solo en el precio, sino que es más cómodo, no hace ruidos y es más respetuoso con el medio ambiente. Además, ha dicho que desde el punto de vista de la autonomía las implicaciones van a ser escasas, pues se pueden recargar en menos tiempo que lo que un conductor está obligado a parar para descansar cada cierto número de kilómetros, que son 45 minutos.

Por eso, augura un "crecimiento exponencial de los camiones eléctricos en nuestras carreteras", si bien ha dicho que para llegar a ese momento, hay que desarrollar a lo largo de todos los corredores de transporte pesado las infraestrucutras necesarias para que exista "esa recarga que permita cargar los camiones cada 400 kilómetros".

Ha añadido que la inversión que se va a hacer por parte de las distribuidoras, de los fabricantes de puntos de recarga y de los operadores va a ser muy grande "para estar preparados para que, cuando llegue ese crecimiento exponencial" del camión eléctrico, "haya los puntos de recarga necesarios en España".

Respecto a los obstáculos que hay para la instalación de puntos de recarga, ha manifestado que muchas veces no hay los procedimientos necesarios para su desarrollo pero, por eso, con cinco años de antelación quieren agilizar esos trámites, poner toda la inversión que sea necesaria y mapear, es decir buscar los puntos en el territorio donde es mejor colocar esos puntos de recarga para camiones, como los puntos logísticos y donde los camiones duermen.