Girteka tiene claro que la mayor barrera para la descarbonización del transporte por carretera es la falta de infraestructura. El gigante lituano del transporte de mercancías señala que la UE de ayudar en este proceso. Así lo refleja un informe del Consejo Internacional de Transporte Limpio (ICCT) y la Alianza Europea de Transporte Limpio (ECTA), de la que Girteka forma parte: "La falta de infraestructuras públicas de recarga y repostaje para camiones se considera el principal obstáculo para una transición más rápida, y las flotas agradecerían el apoyo adicional de otras partes interesadas para planificar la construcción de infraestructuras".
El estudio señala que las empresas de transporte de mercancías por carretera agradecerían el apoyo de otras partes interesadas para construir infraestructuras. Para Girteka, que recientemente ha adquirido 600 camiones eléctricos de Scania, la UE "parece interesada en abordar la cuestión con sus planes de desarrollo de la Red Transeuropea de Transporte (RTE-T), que darían lugar al compromiso de varias partes interesadas de construir infraestructuras para vehículos de emisiones cero".
El desarrollo de la RTE-T podría aliviar el problema, sobre todo si se combina con la construcción de otras infraestructuras relacionadas con el transporte por carretera para los conductores. Según la página explicativa del reglamento comunitario sobre infraestructuras de combustibles alternativos Fit For 55, habría una estación de recarga cada 60 kilómetros, incluida "una estación de recarga en cada zona de aparcamiento segura y protegida" para camiones. Además, se construirían estaciones de recarga de hidrógeno cada 200 kilómetros, con más estaciones en zonas urbanas para finales de 2030.
Autonomía de los eléctricos
Para la transportista, los fabricantes ya no tienen un problema de produccción ni faltan opciones diversas que sirvan para la larga distancia. Según Girteka, los fabricantes han ido ampliando sus capacidades de fabricación y, al mismo tiempo, introduciendo nuevas opciones en el mercado. Para la transportista: "La cuestión de las infraestructuras aún persiste y ensombrece el futuro a corto plazo de un sector del transporte con cero emisiones. Al fin y al cabo, la creación de infraestructuras es mucho más compleja que la instalación de una estación de recarga, especialmente para los viajes de larga distancia de los camiones, que pueden recorrer hasta 1.000 kilómetros o más para entregar una sola carga".
Estas rutas contrastan con que los modelos actuales de camiones eléctricos con batería tienen una autonomía de conducción limitada a 250-300 kilómetros, lo que plantea importantes retos operativos para los casos de uso de alto kilometraje", según el informe del ICCT y la ECTA. Estos camiones pueden ser útiles, sobre todo para viajes de ida y vuelta en los que la infraestructura de recarga esté disponible en ambos extremos. Sin embargo, limita la capacidad de un operador para desplegar la flota de forma flexible.
