La Guardia Civil ha detenido a un matrimonio por su supuesta implicación en el robo de un camión, estafa, uso fraudulento de matrículas y sustracción de una tarjeta de repostaje, según recoge Europa Press. La investigación se inició tras la denuncia por el robo de un camión articulado estacionado en un polígono industrial del término municipal de Mairena del Alcor (Sevilla). Los agentes revisaron las imágenes de videovigilancia y comprobaron que el vehículo había sido sustraído con una cabeza tractora que portaba una matrícula previamente denunciada como robada en Moguer (Huelva), informa en un comunicado.
Los agentes tuvieron conocimiento del uso de la tarjeta sustraída en una estación de servicio en la provincia de Zamora, llegando a constatar los investigadores diferentes pagos con dicha tarjeta en un periodo muy corto de tiempo realizados en diferentes gasolineras por un importe aproximado de 7.000 euros. La revisión de las cámaras permitió identificar al presunto autor haciendo uso de la tarjeta, quien conducía un camión cuya matrícula también constaba como sustraída y denunciada en Fuenlabrada (Madrid). Este camión había sido adquirido previamente mediante una estafa a sus propietarios.
Los ahora detenidos presentaron un justificante de trasferencia bancaria falsa como prueba del pago por el vehículo por un importe de 21.000 euros, una vez ganada la confianza de los vendedores se hicieron con el vehículo antes de que estos pudieran confirmar que el ingreso no se había realizado.
La Guardia Civil estableció un dispositivo de vigilancia y seguimiento permanente sobre dicho vehículo y constataron que un matrimonio de la provincia de Sevilla era el usuario del mismo. Además, se tuvo constancia que el sospechoso había sido contratado para realizar un transporte de 25 toneladas de tubos de hierro galvanizados valorados en más de 20.000 euros desde las instalaciones de la empresa en la provincia de Albacete siendo su destino final una empresa en Alcalá de Guadaíra.
Sin embargo, en lugar de entregar el material en el destino acordado, lo desvió hacia una planta de reciclados en Sevilla capital por una cantidad de 4.000 euros. Al mismo tiempo, se comprobó el intento de venta del camión a terceras personas por 6.000 euros, lo que no podían hacer al ser un vehículo robado, en una investigación en la que se pudieron recuperar aproximadamente 23 toneladas del material sustraído en la provincia de Albacete, así como la cabeza tractora robada en Madrid.