Durante el último Consejo de Ministros de Transportes de la UE, celebrado la semana pasada, se debatió la complicada situación del paso del Brennero, que une Italia con Austria y es también clave para el transporte alemán. IRU, la Organización Mundial del Transporte por Carretera, denuncia que el Gobierno austriaco lleva una década imponiendo restricciones al transporte en ese paso que “han causado perturbaciones innecesarias y onerosas”.
De hecho, IRU asegura que las restricciones llegan a los 70 kilómetros y pide a la Comisión Europea que despliegue sus “herramientas legales” para defender el transporte europeo. En el Consejo de Ministros europeos, tanto Alemania como Italia destacaron que la situación actual es insostenible y provoca largas colas en la frontera. Más importante aún, destacaron que se debe salvaguardar el principio de libre circulación.
“Austria no ha mostrado ninguna voluntad real de resolver el problema del paso del Brennero, que se ha prolongado durante años”
IRU agradece el apoyo mostrado por los ministros de transporte de Bulgaria, la República Checa, Lituania, los Países Bajos y Rumania para respetar la libertad de circulación en la UE: “Esto demuestra que el paso del Brennero es un problema europeo que afecta la facilitación del comercio en todo el bloque”.
La responsable de IRU por la defensa de los transportistas de la UE, Raluca Marian, carga contra el gobierno austriaco: “Desafortunadamente, Austria no ha mostrado ninguna voluntad real de resolver el problema del paso del Brennero, que se ha prolongado durante años. Seguimos escuchando que el ferrocarril y el transporte combinado son la solución. Pero como ha demostrado el tiempo, el ferrocarril por sí solo no puede acomodar el volumen de mercancías que transitan por el paso del Brennero. Ambos modos [camión y tren] son necesarios. Las prohibiciones de circulación han causado una congestión de tráfico masiva. Las colas alcanzan los 70 kilometros y las vacaciones de verano están a la vuelta de la esquina. Esta es una situación inaceptable, sin mencionar las emisiones de CO2. Se puede imaginar el impacto desastroso de los camiones avanzando muy lentamente durante horas, lo que hace que la actitud de Austria sea aún más difícil de entender”.
Todas las herramientas jurídicas
Marian ha agradecido los esfuerzos de la Comisaria de Transporte de la UE, Adina Vălean, para llevar a los Estados miembros a la mesa para mejorar la sostenibilidad del paso Brenner mientras se mantiene la libre circulación de mercancías: “La Comisión debería utilizar todas las herramientas jurídicas a su disposición para desbloquear la situación. Las palabras pueden no ser suficientes”.
IRU ha instado repetidamente a los legisladores nacionales y de la UE a actuar con rapidez y garantizar que las mercancías se muevan sin problemas a través de uno de los puntos de tránsito más importantes de la UE, que recibe alrededor de 7.000 movimientos de camiones por día. La ministra de Movilidad de Austria, Leonore Gewessler, cifra en 5,2 millones de camiones pasaron por el paso del Brennero en 2022.
