Tan solo el 8% de los puntos de recarga de acceso público interurbanos presentan potencias iguales o superiores a los 250 kW, es decir, son de una potencia adecuada para cargar camiones eléctricos. Son 1.509 puntos de 250 kW sobre un total de 19.578 puntos. Esto es, 111 más que en el primer trimestre, según refleja el barómetro de Anfac con los datos actualizados del segundo trimestre del año. La patronal de fabricantes de vehículos subraya que los camiones pueden empezar a cargarse con 150 kW, pero la regulación europea de infraestructura de combustibles alternativos (el Reglamento Afir) indica que la recarga de camiones eléctricos debe tener, al menos, una potencia de 350 kW. El barómetro de Anfac solo segmenta por potencias de hasta 250 kW.
En total, en España hay un total de 1.803 puntos de recarga de, al menos, 250 kW –contando tanto vías urbanas como interurbanas– sobre un total de 47.892 puntos. Estos puntos de recarga con más potencia han crecido en 214 unidades, pasando de 1.589 en el primer trimestre a 1.803: 1.509 están en vías interurbanas y solo 294 en vías urbanas. Que la mayoría estén en vías interurbanas va en el sentido del reglamento Afir de facilitar el transporte de mercancías eléctrico, pero falta mucho para cumplir sus objetivos.
La norma europea mandata que el 31 de diciembre de 2025, es decir, en medio año, "al menos a lo largo del 15% de la longitud de la red de carreteras de la RTE-T, se hayan implantado en cada sentido de circulación grupos de recarga de acceso público destinados a vehículos eléctricos pesados, que incluya al menos un punto de recarga con una potencia disponible individual de al menos 350 kW". Un objetivo que parece difícil de alcanzar.
La carencia de puntos de recarga con una potencia suficiente para camiones eléctricos es uno de los argumentos que esgrimen los transportistas para defender que la movilidad eléctrica no es una opción para el transporte pesado. En su barómetro, Anfac reconoce que estos puntos de 250 kW o más son "absolutamente necesaria para los vehículos pesados". También recoge que hay "dificultades administrativas asociadas al desarrollo de estos proyectos" que son una de las barreras más importantes en la actualidad y tienen paralizados muchos proyectos.
Sin información completa
Además, que tengan una potencia adecuada para cargar un camión no significa que las electrolineras estén adecuadas para hacerlo. Puede ser que, por ejemplo, no estén adaptadas para las dimensiones de un vehículo pesado. Anfac señala que, además de la potencia, "es necesario garantizar que los vehículos pesados puedan emplear esta infraestructura en lo que a maniobrabilidad, tensión de salida y longitud de manguera, se refiere. Y esta información no está disponible ni en fuentes privadas ni públicas.