Desde el pasado 24 de octubre, los más de 300 camiones que transportaban madera a las fábricas de la empresa Ence en Navia (Asturias) y Pontevedra están parados. Este miércoles, Alberto Vila, secretario general de la asociación de transportistas Vieiros, asegura por teléfono que desde entonces "prácticamente no entra madera en las fábricas, por lo que a Ence no le está saliendo bien este paro". Ruta del Transporte ha intentado sin éxito ponerse en contacto con Ence por teléfono y a través de sus correos de prensa.
Los transportistas decidieron dejar de prestar servicio a este fabricante de celulosa porque les había comunicado el día de antes una rebaja en las tarifas que les paga por tonelada transportada de entre un 5% y un 11%, dependiendo de los recorridos y vías. Para ese recorte de las tarifas, Ence se escudaba en la entrada en vigor del aumento de masas en el transporte de mercancías por carretera, que, en el caso de la madera en rollo, puede pasar de las 40 toneladas de masa máxima autorizada a las 52 toneladas.
Desde que paralizaron la actividad, los transportistas se han reunido varias veces con la dirección de Ence. La última vez fue el jueves pasado, 30 de octubre, cuando el cargador puso sobre la mesa una mejora de las condiciones, pero la asamblea de transportistas votó al día siguiente continuar con el paro. Este jueves está agendado otro encuentro entre Ence y los transportistas y lo más probable es que voten la nueva propuesta el viernes.
Alberto Vila explica que entre Galicia y Asturias hay más de 300 camiones que transportan madera para Ence "ya sea directamente o a través de maderistas que trabajan para la fábrica y aplican las tarifas que les marca". En su mayoría, estos transportistas son autónomos con un solo camión o, como mucho "una flota de tres o cuatro vehículos y la mitad trabaja para Ence", explica el representante de Vieiros, que subraya que el seguimiento del paro supera el 90% –"me contaron que esta semana entró un camión en la fábrica de Pontevedra", cuenta como algo excepcional–, aunque Ruta del Transporte no ha podido conocer la versión de Ence.
Un cuarto más de tiempo en cargar
Los transportistas habían advertido de que el aumento de masas y dimensiones podía conllevar que sus clientes se negaran a pagarles más por transportar más carga, que es justo lo que denuncian que ocurre en las fábricas de Ence. Patronales como CETM y federaciones de pymes y autónomos como Fenadismer ya han mostrado su solidaridad con este caso.
Alberto Vila enumera alguna de las consecuencias que tiene cargar más peso: "Los camiones tienen que ir más veces al taller, el vehículo se resiente más y tardo más en cargar, porque antes cargaba 25 toneladas de madera y ahora 32. Si yo hacía tres rutas en ocho horas ahora voy a necesitar diez horas para los mismos recorridos. La fábrica pensaba que los transportistas le iba a cargar más por el mismo precio, y eso no es así", resume.